La traducción perfecta es un objetivo que depende de muchas variables. De hecho hablar de una única versión perfectamente traducida discriminaría la capacidad de varios traductores experimentados. Lo explicaré con un ejemplo. Digamos que damos el mismo texto sobre energía nuclear a 3 traductores expertos en el tema, que además, han trabajado en el campo nuclear y conocen por experiencia propia la terminología. Los 3 traductores han realizado diversos textos de la materia señalada y todos con éxito.

Bajo estas premisas de un contexto ideal, ¿las traducciones de cada sujeto son idénticas? Pues bien sabemos que no lo serán. Entonces, ¿podríamos decir que una de ellas es perfecta y superior al resto? Definitivamente no. Podríamos decir en cambio que cada versión es una muy buena traducción.

  • Tal objetivo a alcanzar por cada profesional de la traducción se construye con experiencia y con el uso de un grupo de elementos, al que en SMG y la CRL (Centro de Investigación Lingüística, por sus siglas en italiano) hemos denominado el kit de la calidad (o kit qualità por su nombre italiano). El kit está conformado por:
  • Traducciones de trabajos anteriores: Para esto es necesario clasificar nuestros textos trabajados en sectores, temas, clientes, etc. Dicha clasificación es aún más dinámica si se usan memorias de traducción de software CAT.
  • Glosarios terminológicos: Armar glosarios mientras se traduce es una herramienta muy útil que nos servirá en el futuro para muchos trabajos. Su construcción puede ser muy sencilla, basta abrir una hoja de Excel lo que permitirá filtrar con facilidad algún término, o en su defecto usar tablas en Word. Aquí también es necesario clasificar los glosarios pues bien sabemos que un término puede traducir de diferentes maneras según el contexto.
  • Páginas web del sector o del mismo cliente: Esta herramienta servirá como un apoyo que siempre debe ser juzgado antes de utilizarse por medio de una correcta investigación. No podemos usar la primera traducción que encontramos de ese término que nunca habíamos escuchado, sólo porque lo hemos hallado en la web de una empresa del mismo sector. Ese término deberá encontrarse al menos 2 ó 3 veces más en distintas webs o libros si es que los tenemos o hallamos en Internet para poder fiarnos de tal interpretación.
  • Contacto con el cliente/referente: En algunos casos, es necesaria la opinión de la persona que usará o trabajará con los documentos traducidos aún cuando está no conozca el idioma a traducir. Este contacto permite conocer de manera directa el sentido que se busca dar a una frase determinada. Es importante hacerle entender al cliente que no es una cuestión de ignorancia, más bien todo lo contrario, es nuestro profesionalismo lo que nos obliga a solicitar información para lograr una traducción óptima.

Gracias a estos alcances y a nuestra constante preparación y lectura estaremos en grado de rendir una excelente calidad, la cual siempre será valorada por la satisfacción del cliente.

Rene Vidal

Project Manager en Studio Moretto Group America SAC.

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